Veinte segundos. Ni uno más. Ese es el escasísimo tiempo que necesita un camaleón para cambiar de color, adaptarse a su entorno y protegerse de sus depredadores. Por desgracia, a nosotros, los humanos, nos cuesta bastante más aceptar que el ayer, el hoy y el mañana tendrán poco ver. Quizá por eso andamos algo confusos y estresados desde que en noviembre de 2022 se lanzó ChatGPT. En apenas unos meses, nos hemos metido de lleno en la revolución de la inteligencia artificial. Y, como toda revolución, esta también conlleva MUCHOS cambios.

¿Cómo vamos a utilizar la IA en la comunicación corporativa? ¿Qué riesgos supondrá para la reputación de las compañías? ¿Cómo puedo sacarle partido a esta nueva tecnología? ¿Llegaremos a vivir en un mundo dominado por los robots? Seguramente, estas y otras preguntas te causen algún que otro desvelo. Y es normal. Lo cierto es que para responder a todas ellas con certeza necesitaríamos una bola de cristal y algo de bujería. Por eso, mi misión con este artículo es más simple (y útil, por qué no decirlo): voy a compartirte algunos recursos para que la inteligencia artificial y la comunicación corporativa de tu compañía convivan en un mismo ecosistema. Aquí tienes 3 reglas básicas para que tu adaptación al nuevo entorno que vivimos marcado por la IA sea más amable.

Regla nº1. Acepta la incertidumbre.

Seguro que has escuchado mil veces eso de que “el cambio es la única constante”. Se le atribuye a Heráclito, nada más y nada menos que en el 535 a.C. ¡Y vaya si tenía razón! Cada vez hay más cambios tecnológicos y se suceden más rápido. Piensa que hace solo unos 40 años que los ordenadores llegaron de forma habitual a las casas y las oficinas y ahora estamos inmersos en la revolución de la IA.

Ya hemos hablado de los camaleones, pero quizá lo que no sabías es que tienen la capacidad de mover sus ojos de forma independiente, de modo que su campo de visión es de casi 360 grados. De esto también podemos aprender. Aunque no podemos ver el futuro, sí podemos mirar con atención y entusiasmo todo lo que hay a nuestro alrededor. Aceptar que las cosas cambiarán y tomar decisiones acordes al momento que vivimos en cada instante es fundamental para seguir comunicando de forma eficaz.

Regla nº2. Si tienes miedo, que sea a quedarte atrás.

El miedo al cambio es humano. Pero quizá estás poniendo el foco en el lugar equivocado. Ahora mismo, si realmente debes tener miedo de algo, es de quedarte atrás en la adopción de la IA en la comunicación corporativa. Ya hemos dicho que los cambios se suceden rápido, por lo que el impacto de no avanzar al mismo ritmo que la tecnología es mayor que nunca. Empezar a utilizar hoy la inteligencia artificial en tus estrategias de marketing y comunicación digital es fundamental para seguir siendo competente el día de mañana.

Regla nº3. Reinvéntate (una y otra vez).

Desde las notas de prensa hasta las redes sociales. La comunicación corporativa de la última década ha evolucionado radicalmente. Ahora con la llegada de la inteligencia artificial esa revolución es aún mayor.

Sundar Pichar, el CEO de Google, afirma que la inteligencia artificial tendrá un impacto para la sociedad todavía más grande que el que tuvo el descubrimiento del fuego o de la electricidad. Sí, seguro que esta nueva tecnología traerá riesgos (como todas), pero quizá deberías empezar a plantearte cómo puedes usarla a tu favor.

La IA nos brinda la oportunidad de personalizar nuestra comunicación como nunca antes, de conocer a nuestras audiencias hasta el más mínimo detalle, de generar contenidos creativos del modo más ágil… En definitiva, tenemos en nuestras manos la capacidad de comunicar mejor que nunca. ¿El reto? Volver a reinventarnos una vez más.

Si quieres inspirarte con algunos ejemplos prácticos de cómo utilizar la inteligencia artificial en la comunicación corporativa, no te pierdas el vídeo del evento que organizamos en Cícero con la participación de Carlos Santana, ingeniero especializado en IA y divulgador.